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Muertes y ataques a iglesias en el último año

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Los datos más objetivos que encontrarás acerca de la violencia hacia los cristianos

En el periodo de análisis de la Lista Mundial de la Persecución de 2017 se han registrado un total de 1.270 cristianos muertos por su fe y 1.329 iglesias atacadas. Estos ataques pueden variar desde ataques leves (profanación o actos de vandalismo) a ataques extremos (destrucción completa). Estos números son mucho menores que los publicados en la Lista Mundial de la Persecución de 2016, sobre todo en el número de víctimas mortales que se situó el año pasado en 7.106. El número de iglesias atacadas también ha sufrido un descenso significativo ya que el año pasado la cifra era de 2.425 iglesias atacadas.

Es muy difícil establecer datos objetivos, especialmente en zonas de guerra y conflictos. Algunos ejemplos son los territorios hostiles de Myanmar; las zonas de guerra en Irak y Siria; los montes de Nuba en Sudán; los estados del «Cinturón Central» de Nigeria con ataques de ganaderos de la etnia Hausa-Fulani o los estados nigerianos del Noreste agitados por la violencia de Boko Haram; las zonas atacadas por Boko Haram en Chad y Camerún; la situación de determinadas regiones de República Centroafricana donde las milicias musulmanas mantienen la influencia. También es difícil conocer la situación en los «campos de la muerte» del este de Congo, en la provincia de Kivu del Norte. En todas estas áreas, las cifras registradas siempre son demasiado bajas en comparación con la realidad de la zona.

Además de razones de inteligencia militar, el número de incidentes violentos siempre es menor debido a que ciertas situaciones violentas para los cristianos que se dieron en el período de análisis de la LMP 2016 se han aliviado de un modo u otros durante el período analizado para la LMP 2017. Es por esto, por ejemplo, que los asesinatos y ataques cometidos por Boko Haram en Nigeria y los países vecinos apenas se incluyen en el recuento. Además de las dificultades para recoger información veraz en lugares de conflicto como este, es muy probable que la violencia de Boko Haram haya causado menos muertes y ataques a iglesias ya que se ha visto sometida a ataques de diferentes fuerzas gubernamentales y ha jugado un papel a la defensiva en los últimos meses.