Al hablar de adicciones, de adicción a las drogas o al alcohol, a los diferentes tipos de adicciones, el descubrimiento de que un ser querido está abusando de las drogas es generalmente lento y atroz. Hay pequeñas señales al principio. La persona no se presenta a algunas citas, falta un poco de dinero, pero no es gran cosa. Algunas de las acciones de la persona no tienen mucho sentido, pero las explica de una forma u otra. Pero las explicaciones no llegan a tener sentido por completo. Pero todavía pueden minimizarse.
Pueden suceder cosas más extrañas. Un accidente de coche. Un puesto de trabajo perdido. Un fin de semana perdido. Citas con los niños a las que no acude. Tal vez una diatriba furiosa que no tiene que ver con su carácter.
Tal vez el consumo de drogas o alcohol se nota y se habla de ello, del tema de las adicciones. La persona se compromete a dejar de consumir, dice que fue sólo un par de veces y que a él (o a ella) no le gustó de todos modos.
Sin embargo siguen apareciendo pequeños problemas. Los ánimos se ponen peor y comienza a haber más discusiones, más desapariciones, más dinero o posesiones que faltan. Tal vez el reproductor de DVD desaparece, o un abrigo de cuero o joyas.
Tal vez el jefe llama a casa y habla con la esposa y dice que quería que supiera que despidió a su cónyuge porque él (o ella) estaba consumiendo drogas. Que usted tiene que conseguir ayuda para él (o ella) en el tema de las adicciones. Luego cuelga el teléfono.
Quizá, con ayuda, la persona encuentra otro trabajo, pero no dura. La gente es injusta, sospechosa, lo vigilan. Es posible que haya otro accidente de coche.
El tema del consumo de drogas se saca de nuevo en la conversación, pero esta vez hay hostilidad. “¿Por qué no me apoyan?, dice. Estoy tratando de dejar de consumir y no puedo hacerlo si continúan criticándome”. Así que el cónyuge deja el tema.
Esto puede durar años o puede terminar. Si esto sigue, se pondrá peor, no mejor. Esto puede terminar con la persona amada – quien puede ser un padre, un hermano, un niño o alguien que ha sido su mejor amigo desde hace décadas – perdiéndolo todo debido a la adicción.
Pero puede tener un final mucho mejor. En muchos casos, se necesita de una intervención de adicción a las drogas para cambiar el curso de esta auto-destrucción. En tiempos como estos, los familiares que tratan de salvar la vida de un ser querido necesitan la ayuda de un servicio de rehabilitación de la adicción a las drogas competente, que pueda ayudarles a establecer un plan de intervención y de tratamiento que realmente funcione.
Este es un servicio que frecuentemente ofrece el personal de los centros de rehabilitación de drogas y alcohol en todo el mundo.
Ayuda con las adicciones e intervencionistas :
Muchos centros en nuestroa Paices tienen intervencionistas experimentados con los que trabajan para ayudar a las personas a liberarse de la adicción. Cuando es necesaria una intervención de adicción a las drogas, ellos saben a quién enviar, el cual puede trabajar con el adicto y sacan a la luz el verdadero deseo de esa persona para vivir de una forma limpia y sobria de nuevo.
A menudo, los encuentros familiares para tratar de poner fin a la adicción pueden ser muy emotivos porque cada uno insiste en la rehabilitación y está temeroso de lo que ocurrirá si la idea no es aceptada. Pero alguien con experiencia en la intervención de adicción a las drogas puede tener un papel calmado en el logro de la propia decisión del adicto para encontrar la sobriedad.
