Recemos por las víctimas y los familias de una de las peores masacres de la historia reciente de EEUU
Ocurrió durante un festival de música country al aire libre en Las Vegas, Estados Unidos, en una zona de casinos en la ciudad de Nevada. El pánico se apoderó de los presentes luego de que un hombre armado, identificado como Stephen Paddock, de 64, empezara a abrir fuego desde un piso alto del Hotel Mandalay Bay.
De momento, el saldo era de 50 personas muertas y más de 400 heridos, ya calificado como una de las peores masacres de la historia reciente de Estados Unidos.
Por su parte, el papa Francisco manifestó su profunda tristeza y cercanía espiritual a todos los afectados en la tragedia ocurrida en Las Vegas. Lo hizo por medio de un telegrama enviado por el cardenal Parolin, Secretario de Estado, dirigido a Joseph Anthony Pepe, Obispo de La Vegas.
En la misiva, el Pontífice elogió los esfuerzos de la policía y del personal de servicio de emergencia y ofreció la promesa de sus oraciones por los heridos y por todos los que han muerto, confiándoles al misericordioso amor de Dios.
El móvil terrorista fue descartado en primera instancia por las autoridades y se informó al inicio que el hombre, que habría actuado como“lobo solitario”, fue abatido. Sin embargo, horas después se indicó que se suicidó. Igualmente, el motivo del ataque continuaba siendo investigado, además del surgimiento de algunas versiones que daban cuenta de la reivindicación del Estado Islámico con respecto al ataque.
Las escenas de caos y terror siguen presentes y el envío de las condolencias no se hizo esperar, entre ellas la del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien luego declaró: “Fue un acto de pura maldad”.
Oremos por las víctimas de este ataque y sus familias.
