Inicio Jóvenes La formación de los jóvenes, clave para que otro mundo sea posible

La formación de los jóvenes, clave para que otro mundo sea posible

420
0

Más de 71 millones de jóvenes en todo el mundo se encuentran sin empleo, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Una cifra además que no deja de crecer. Sin embargo, los jóvenes suponen una gran fuerza y son motor de desarrollo. De todo esto, se ha estado hablando en Naciones Unidas en una jornada que es una de las contribuciones salesianas sobre el tema “Estrategias para erradicar la pobreza y lograr el desarrollo sostenible para todos”.

La falta de oportunidades de los jóvenes los está convirtiendo en personas más vulnerables a la pobreza, a los abusos, al terrorismo… Los misioneros salesianos en todo el mundo trabajan para romper con esta dinámica y proporcionar formación a los jóvenes, sobre todo los que se encuentran en una situación de mayor vulnerabilidad, sean capaces de buscar formas de vida más dignas. En este sentido, podemos encontrar muchos ejemplos a lo largo del mundo:

  • El centro de formación profesional en el campo de refugiados de Kakuma (Kenia), donde 300 refugiados reciben.
  • Los centros de mediación de El Salvador, Costa Rica, Nicaragua, Perú, Ecuador y Bolivia donde se ofrece formación gratuita para jóvenes en comunidades marginadas y en riesgo de caer en la violencia.
  • En Quetta, Pakistán, los misioneros salesianos cuidan de más de 3.400 niños, niñas y jóvenes. Les dan comida, educación, hogar…
  • En Haití, los misioneros salesianos están trabajando para que la educación de calidad llegue a los jóvenes y que los profesores reciban la formación adecuada.
  • En India, Argentina, Filipinas, Tailandia… los misioneros han conseguido acuerdos de formación práctica en empresas como Fiat, Siemens, Porsche o BMW.

Conseguir que los jóvenes encuentren empleos dignos y oportunidades de futuro empieza por su formación y es uno de los grandes desafíos del mundo para los próximos años porque sin ellos no hay otro mundo posible.