El año 2018 se resume en la historia de cada una de las personas que hemos atendido.
Porque, durante este año que ya termina, hemos sido capaces de llegar a miles de hombres, mujeres y niños que necesitaban atención urgente. No nos ha frenado que estuvieran en los lugares más conflictivos, aislados o remotos del planeta.
Y lo hemos logrado gracias a nuestros colaboradores, socios y donantes.
Porque ellos hacen posible que nuestros camiones cargados con medicamentos avancen. Hacen posible que nuestras clínicas móviles funcionen; que nuestros hospitales se levanten en una semana.
Porque todos formamos parte de Médicos Sin Fronteras.
Todos formamos parte de esta gran cadena de ayuda.
Muchas gracias por hacer de este mundo un lugar más humano.
