Los cristianos chinos en prisión memorizan toda la Biblia para que el gobierno “no se lleve lo que está escondido en sus corazones”. Pues ellos han entendido que, a pesar de que decomisen sus Biblias físicas, lo que han recibido de Dios permanecerá para siempre.
Nuestros hermanos en China están siendo perseguidos y encarcelados por su fe, para liberarlos solo tienen que renunciar a Cristo, pero ellos, valientemente, permanecen en el amor del Salvador. Es por ello que, para seguir alimentándose espiritualmente, están memorizando pasajes de las Escrituras escritos en pequeños pedazos de papel que ingresan de manera ilegal.
De esta manera, los cristianos están memorizando toda la Biblia, como en el caso de María*. Wayne Cordeiro, pastor de New Hope Christian Fellowship, relata su historia. En una visita que Wayne hizo a una iglesia en China, notó que una mujer regaló su Biblia a una vida nueva y que recitó de memoria cada versículo del capítulo que leían.
«Cuando terminó la prédica, me acerqué a ella y le dije: ‘Recitaste todo el capítulo'», dijo. Ella respondió: «En la cárcel tienes mucho tiempo». «¿No confiscan la Biblia?», preguntó él.
Ella le respondió que si bien cualquier material cristiano es efectivamente confiscado, las personas escriben textos de la Biblia en papel y lo esconden de los guardias de la prisión. «Es por eso que lo memorizamos lo más rápido posible, porque aunque pueden quitarte el papel, no pueden quitarte lo que está escondido en tu corazón», explicó.
Pero eso no fue lo único que ocurrió aquel día. Después de la prédica, un cristiano chino le pidió a Wayne: “¿Podrías orar para que algún día podamos ser como tú?”. “Lo miré y le dije: ‘No haré eso. Ustedes viajan 13 horas para llegar aquí y escuchar la Palabra de Dios. En mi país, si tienes que conducir más de una hora, la gente no viene’”, respondió Wayne.
“Te sentaste en un piso de madera durante toda la prédica. En mi país, si las personas tienen que sentarse más de 40 minutos, se van. Te sentaste en madera DURA, en mi país, si no se trata de bancos acolchados y aire acondicionado, la gente no regresa. En mi país tenemos más de dos Biblias por familia, y no leemos ninguna. Ustedes apenas tienen Biblias y las memorizan en pedazos de papel. No voy a orar para que seas como nosotros, pero sí voy a orar para que seamos como ustedes”, concluyó el predicador.
China está experimentando un gran crecimiento de creyentes en las últimas décadas. Las estimaciones incluso han sugerido que China está en camino de tener la mayor población cristiana del mundo para 2030. Se estima que unos 30 millones de cristianos en China asisten a iglesias sancionadas por su gobierno, mientras que muchos otros asisten a iglesias ilegales de casas subterráneas.
En un esfuerzo por detener el rápido crecimiento del cristianismo, las autoridades de toda China han clausurado varias iglesias y han arrestado a cristianos por adorar a Jesús sin la aprobación del gobierno. ¡No dejemos de orar por la iglesia en China!
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(*) Nombre modificado por razones de seguridad
