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Endepa acompaña a comunidades del Chubut que luchan contra la megaminería

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El Equipo Nacional de Pastoral Aborigen ratificó su apoyo a quienes se oponen a la actividad minera a gran escala y exhortó a un debate pacífico, racional y con respeto a las partes intervinientes.

El Equipo Nacional de Pastoral Aborigen (Endepa) y la Comisión Episcopal de Pastoral Aborigen (CEPA) expresaron su acompañamiento a las comunidades mapuche-tehuelche del Chubut en su lucha contra la megaminería y respaldó el trabajo de sus equipos en el sur del país.

Endepa y CEPA manifestaron este apoyo tras recibir “informaciones creíbles en torno a actitudes intolerantes de parte de algunos sectores de la conducción de esa provincia, por la oposición a la autorización de la actividad minera a gran escala en el país”.

Tras lamentar que la situación “salga del plano de los argumentos e ingrese en el de los ataques personales o institucionales”, sostuvieron que también acompañan “el reclamo de que sus voces sean escuchadas con respeto y adecuado espacio en los medios de comunicación”.

“Una vez más exhortamos a todas las personas que estén interviniendo en esta discusión, que lo hagan en forma pacífica, racional y con respeto a todas las partes intervinientes”.

Texto del comunicado
A las Autoridades Públicas y empresariales de la Provincia del Chubut 

Como responsables de Endepa (Equipo Nacional de Pastoral Aborigen) y de la CEPA (Comisión Episcopal de Pastoral Aborigen), respectivamente, y habiendo recibido informaciones creíbles en torno a actitudes intolerantes de parte de algunos sectores de la conducción de esa Provincia, por la oposición a la autorización de la actividad minera a gran escala en nuestro país, expresamos nuestro parecer y nuestro apoyo a las Comunidades Indígenas y a Endepa local. 

Ante las políticas extractivistas, está a la vista que se están generando, desde hace casi dos décadas, importantes resistencias y movilizaciones de parte de nuestra sociedad. Como Iglesia hemos alertado sobre los problemas ambientales, la necesidad de defender el agua y de respetar la vida de las Comunidades Indígenas y rurales cuyos destinos serían afectados por este tipo de proyectos. 

Endepa acompaña desde hace más de cuatro décadas a muchas de esas comunidades indígenas, y en la meseta centro norte del Chubut a una buena parte de las comunidades mapuche-tehuelche. Es un trabajo intenso, cotidiano, no exento de errores y omisiones, pero siempre comprometido con las necesidades de las personas y comunidades que habitan ese extenso territorio.

En las últimas semanas, con motivo de la presentación de una acción judicial por parte de cuatro comunidades mapuche-tehuelche contra el proyecto de zonificación en análisis en la Legislatura del Chubut, distintas voces oficiales han cuestionado públicamente el accionar de Endepa o de algunos de sus miembros y al mismo tiempo han puesto en duda la legitimidad de las autoridades de esas comunidades, respaldando a otros miembros de los pueblos afectados que se han manifestado en favor del proyecto oficial. 

Más allá de que no es Endepa la que presentó la acción judicial, sino cuatro comunidades a través de su representante legal, nos preocupa que una discusión tan importante para los Pueblos Indígenas y para toda la comunidad del Chubut, salga del plano de los argumentos e ingrese en el de los ataques personales o institucionales, pero sobre todo que se ponga en duda la legitimidad de las decisiones tomadas por algunas comunidades. Acompañamos también el reclamo de que sus voces sean escuchadas con respeto y adecuado espacio en los medios de comunicación.

Pedimos a todas las personas, y especialmente a quienes ejercen funciones públicas, que cesen en esta forma de actuar, que atenta incluso contra el propio respeto que merecen las personas que han sido reconocidas con el voto popular, porque del mismo modo que se cuestiona a las autoridades de las comunidades y sus decisiones, se debilita la autoridad pública.

Una vez más exhortamos a todas las personas que estén interviniendo en esta discusión, que lo hagan en forma pacífica, racional y con respeto a todas las partes intervinientes.