Con el objetivo de facilitar sobre las medidas a tomar ante un posible caso de bullying o acoso escolar, se presentó una campaña integral contra dicha problemática, que se aplicará en escuelas de la ciudad de Buenos Aires con la inclusión de un protocolo de acción y prevención.
El objetivo será difundir y concientizar sobre los problemas del acoso escolar. La campaña, que cuenta con el apoyo de la UBA, la Defensoría del Pueblo porteña, la Organización de Estados Iberoamericanos, la comunidad Antibullying Argentina y la fundación Pinta Argentina, se extenderá tanto a escuelas públicas como privadas.
Según anticiparon los organizadores, el protocolo incluye la conformación de un equipo anti bullying compuesto por docentes, alumnos, directivos y padres designados por la escuela que, ante un hecho de hostigamiento, deberán asentarlo y seguir el caso a través de entrevistas, evolución de los alumnos implicados, documentación de lo ocurrido y sanciones, si fuera necesario.
¿Qué es?
El protocolo de actuación es una guía, de carácter orientativo que pretende facilitarle a las instituciones educativas un modelo de intervención sobre las medidas a tomar ante un caso de bullying o acoso escolar.
¿Qué se requiere?
En primer lugar la formación de los docentes para aprender a detectar el bullying o acoso escolar, y el compromiso de toda la comunidad educativa (Padres, docentes, directivos, personal de la institución y alumnos)
Beneficios
Al ser un procedimiento pautado, estudiado y consensuado, posibilita una rápida intervención de manera efectiva, minimizando errores.
Actores que intervienen
El protocolo establece la conformación de un equipo anti bullying en la institución (puede ser el mismo equipo de convivencia escolar)
En este grupo participan alumnos, docentes, directivos y padres designados por la institución, los cuales previamente reciben la formación adecuada para activar el protocolo.
En el caso de que cualquier miembro de la institución detecte con certeza o con presunción que un alumno es víctima de Bullying, debe comunicarlo de inmediato a alguno de los que conforman el Equipo Anti Bullying, momento en el cual se comunica a la dirección del establecimiento, la cual está facultada para activar el protocolo a través de lo que llamamos «protocolo inicial».
Cuando la dirección despliega este procedimiento los miembros del equipo se reúnen siendo la primera acción asegurar la integridad física y psíquica de la presunta víctima de Bullying por lo que se diseñarán medidas para protegerla. A continuación se abre un registro de actuación. En este registro quedan asentadas la denuncia inicial, el relato de las circunstancias por las cuales se presume el acoso escolar y los datos de los posibles implicados. Más tarde se anexarán las entrevistas realizadas por los miembros del equipo a padres, alumnos implicados, testigos, docentes, resoluciones tomadas sobre el caso e instancias de seguimiento pautadas.
Toda esta documentación se llevara a cabo a través de formularios de actuación estandarizados, diseñados por la Comunidad ABA.
Se brindarán también al Equipo Anti Bullying guías orientativas para realizar las entrevistas ya que en este momento es importante saber QUÉ preguntar y CÓMO hacerlo.
– Se establecen sanciones, de ser necesario.
– Se establecen medidas reparadoras.
– Se establecen acciones interventivas sobre el grupo de alumnos dentro del cual se produjo el incidente.
– Se establecen plazos de seguimiento de la evolución de los alumnos implicados.
– Se documenta cada uno de estos pasos en el registro de actuación a través de los formularios estandarizados
Una vez finalizado el proceso se labra un informe del mismo y se comunica al consejo escolar correspondiente.
Se desactiva el protocolo.
En casos de delitos penales, violencia sexual, sexting y cyberbullying el protocolo establece procedimientos especiales.
Transcurrido un periodo de 6 meses a partir de la puesta en marcha del P A C volveremos a monitorear la evolución de la situación entrevistando nuevamente al alumno/a Acosado/a para verificar si ha mejorado su estadía en la institución escolar y se ha logrado su reinserción en el grupo.
¿Por qué es importante la implementación del citado protocolo?
Cuando no se toman medidas existe un mayor riesgo para la Institución escolar de tener que responder más tarde o más temprano a demandas judiciales en algunos casos. Sumado a esto, se ha comprobado la escalada y el agravamiento de los conflictos cuando no se interviene a tiempo; ya que si no se adoptan medidas y las conductas no son sancionadas y dirigidas no sólo aumenta el número de alumnos que intervienen en la dinámica, sino que además el Acosador o Acosadora interpretan la falta de sanción a sus conductas violentas como apoyo implícito y se incrementa el grado de violencia en sus acciones.
