Por segundo año consecutivo, elegimos la José Manuel Estrada para agasajar a niños y niñas de distintos puntos de la provincia, que por diferentes motivos pasan muchas horas de sus vidas en dicha escuela. Y justamente nuestro objetivo fue hacer que pasen algunas horas distintas, jugando, bailando, sonriendo y compartiendo la merienda con ellos. Un gran reconocimiento y agradecimiento a «las seños». Quienes dejan muchas horas de sus vidas cuidando a los niños. En la persona de Susana Corbalan, agradecemos a todo el personal de la escuela, como así también a la Directora, quien nos permitió vivir una hermosa tarde junto a los pequeños de la Escuela Hogar.
