Noor es una arquitecta cristiana iraquí de 29 años. Como tantos otros, ella y su familia tuvieron que huir de la noche a la mañana cuando el Estado Islámico invadió su ciudad en 2014. Noor estaba novia en este entonces. Cuando vivía como desplazada, se casó y tuvo una hija, que ahora tiene dos años. Un año atrás, ella regresó a su ciudad natal, Qaraqosh. «Parecía el propio infierno. Se sentía un olor feo – de sangre, suciedad, cuerpos en descomposición. Era como una ciudad fantasma. Sin luz, sin nada», describe la joven madre sobre su primera impresión cuando llegó a la ciudad.
Noor ahora tiene una familia. Juntos, ellos intentan reconstruir sus vidas en Irak
Pero Noor no desistió, decidió seguir adelante y reconstruir la ciudad. «Empecé a trabajar como voluntaria en el comité de reconstrucción de la iglesia. Primero, documentando los daños, después ayudando a coordinar el proceso de reconstrucción «, relata. Cuando volvió permanentemente a Qaraqosh, el comité de reconstrucción de la iglesia le ofreció un trabajo en el departamento técnico, donde ella trabaja como arquitecta ahora. «Yo trabajo en la información, datos y registros. A través de eso, puedo ayudar a otras familias a reconstruir sus casas «. Noor tiene esperanza que en el futuro Qaraqosh sea mejor que antes.
La cristiana perseguida Noor tiene el privilegio de trabajar en la reconstrucción de su ciudad
Noor expresa su gratitud al saber que cristianos de todo el mundo están acompañando a los cristianos de Qaraqosh de forma especial este fin de semana de Pascua. Ella dice: «En mi nombre y en el de cada cristiano de Irak, agradecemos a cada cristiano en el mundo que se está acordando de nosotros. Estamos agradecidos por ayudarnos también con sus oraciones. Gracias «. Ora por Noor, su familia y los cerca de 25 mil cristianos que regresaron a Qaraqosh y están celebrando la primera Semana Santa después de que el Estado Islamico fue expulsado de Irak.
MARCA LA DIFERENCIA EN ESTA SEMANA SANTA
Además de apoyar a nuestros hermanos en oración, tú puedes ayudarles a construir un futuro mejor. Te invitamos a bendecir a las familias iraquíes en la reconstrucción de sus casas y tener una nueva perspectiva. Ellos te necesitan.
