”No te rindas conmigo”, dijo Wilson*, un exmédico brujo en Kapembwa, a orillas del Lago Tanganyika. “Por favor enséñame la Palabra de Dios. Quiero servirle.” Es normal para el equipo de OM encontrar personas involucradas en la brujería que busquen ser liberadas, pero Wilson quería más.
Al crecer en una familia de médicos brujos, Wilson tuvo visiones a los 11 años y practicó la brujería por los siguientes 25 años. Para ganar poder, indagaba más y más profundo en el mundo espiritual. En Febrero Wilson se cayó bajando de una montaña. Cuando despertó, no podía mover su pierna derecha y tuvieron que llevarlo. Decidió que era suficiente. No quería vivir más bajo el control de los espíritus, aun si eso significaba perder poder y riquezas. Llamó a Clement, de OM, para pedir ayuda. “Por favor ven a mi casa para orar y quemar todos mis talismanes esta noche”, le rogó. Dos veces al día por una semana el equipo de OM se turnó para adorar y orar en la casa de Wilson, contándole sobre de Jesús quien vino para destruir la esclavitud a los espíritus.
“He visto a muchos venir por oración, pero luego volver a la brujería”, dijo Abbie Corbie de OM. “Pero, Wilson quiere estar a cuenta con Dios de ahora en adelante.”
Con su pierna sanada, Wilson recorre la aldea hablando de su nueva vida. Golpea las puertas de sus antiguos clientes para decirles que solo Jesús tiene poder y que deberían quemar los talismanes que él les dio. “Todos lo conocen como el gran médico brujo; ahora su historia puede tener un gran impacto en el pueblo”, dijo Clement. “Tenemos que invertir en él para que su familia permanezca firme y sea un testimonio vivo a las orillas del lago.” Por favor ora por la provisión y protección de Dios para Wilson y su familia mientras buscan una nueva manera de proveer para su sustento.
