Inicio Iglesias Encuentro con Uniformados Evangélicos

Encuentro con Uniformados Evangélicos

364
0

 El viernes 18 tuvo lugar el Primer Encuentro con Uniformados Evangélicos y la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (ACIERA), donde alrededor de 450 uniformados se dieron cita para confraternizar y orar por sus vidas. Asimismo compartieron una pequeña reflexión los pastores Carlos Belart, Osvaldo Carnival y Norberto Saracco, quienes están ligados por vivencia, llamado y servicio a las fuerzas, y quienes mantienen una relación comprometida con aquellos que dan su vida por la patria.

La bienvenida fue dada por el pastor Rubén Proietti, presidente de ACIERA, quien puso valor a la tarea de aquellas personas que son parte de las diferentes fuerzas de seguridad, armadas y de servicio, y que además tienen a Jesús como su seguro Salvador y Señor. Al igual que lo hizo el pastor Christian Hooft, vicepresidente de Relaciones Internas, quien ponderó a cada uno de los uniformados en reconocimiento de la labor que llevan adelante con esmero, compromiso y amor por la patria y los conciudadanos. 

Luego, presentados siempre por el pastor Jorge Gómez, pro-secretario de ACIERA, quien ofició de maestro de ceremonias, siguieron los tiempos de reflexión de los pastores, Belart, Carnival y Saracco. Quienes hablaron de la fe y el carácter del uniformado, la cobertura espiritual y la formación de cada uno de los integrantes de las fuerzas que aman y respetan a Dios. En el programa también participó el Capellán Sub Oficial retirado de la Policía Bonaerense, José Rodolfo Baif, quien hizo lectura de las necesidades de los uniformados y oró por ellos el pastor Alejandro Espínola, integrante del Consejo Directivo de ACIERA. Asimismo lo hizo la Vicepresidente de Gestión, Silvia Arn de Mateo, quien además tuvo unas palabras de aliento para los hombres y mujeres de las fuerzas. 

La recepción de los uniformados fue muy favorable y vieron con agrado el interés de ACIERA en establecer un diálogo fluido para crear así un espacio de unidad, de fortalecimiento mutuo y de contención espiritual.