Los líderes del gobierno se reúnen hoy en Ginebra para una conferencia sobre promesas de contribuciones para Yemen.
Tres años después del comienzo de la guerra , los habitantes viven en una miseria indescriptible, debido a la forma en que se llevan a cabo las hostilidades. Durante años, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha estado exhortando a las partes en conflicto a que eviten a los civiles tanto como sea posible, sin ningún resultado.
«Las nefastas necesidades de las familias se reducirían, al igual que las enfermedades, la malnutrición y las muertes de civiles, si se respetaran los principios más esenciales del derecho internacional humanitario», explica Robert Mardini, director regional del CICR para el Cercano y Medio Oriente. -orient. «Ante la aguda escasez de alimentos y medicinas, la sociedad yemení está ahora sucumbiendo a una muerte lenta. Nos enfrentamos a una situación de gravedad indescriptible. »
Durante los últimos tres años, el CICR ha estado pronunciando los mismos mensajes: los civiles no deben ser atacados, ni hospitales, ambulancias ni personal humanitario. Las restricciones a la importación y libre circulación de bienes y ayuda humanitaria en el país deben ser relajadas. Estos mismos mensajes, repetimos hoy, con la esperanza de que finalmente sean escuchados. Hay una brecha significativa entre las palabras que escuchamos en respuesta a estas llamadas y la realidad que vemos sobre el terreno.
El progreso es posible, sin embargo. Tras la conclusión de nuevos acuerdos, el CICR pudo visitar a las personas detenidas en relación con el conflicto en ambos campos. Este paso muestra que las partes pueden encontrar formas de cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario. Pero debemos hacer más.
El CICR también ha desplegado equipos quirúrgicos especializados en dos hospitales en ambos lados de la primera línea, uno en Aden y el otro en Saada, para proporcionar atención vital a los heridos. El año pasado, un total de 139.967 personas fueron atendidas en estas dos instalaciones con el apoyo del CICR.
