Cristianos evangélicos de Hong Kong acuden vestidos de negro a sus cultos, en solidaridad con los cristianos perseguidos en China.
Querían mostrar su tristeza con el color del luto, y a la vez solidarizarse públicamente con sus hermanos en la fe perseguidos en China, siguiendo una campaña difundida en las redes sociales los días pasados.
Con esta idea, en los cultos de Navidad los cristianos evangélicos de Hong Kong asistieron vestidos de negro a las celebraciones.
Según los organizadores, al menos cuarenta y siete mil fieles se unieron a la iniciativa para expresar su apoyo a los cristianos de la China continental que sufren persecución.
“Queremos que los cristianos de China popular sepan que nosotros conocemos cuanto allí les sucede y les apoyamos”, dijo uno de los organizadores de Hong Kong.
Se repetirá el próximo domingo, 30 de diciembre.
En las semanas pasadas tres templos protestantes “no oficiales” (no controlados por el Gobierno comunista) fueron cerrados en Beijing, Chengdu y Guangzhou.
El pastor de Chengdu, Wang Yi y su esposa, junto a otros 100 miembros de la comunidad fueron arrestados bajo la acusación de “incitación contra el poder del Estado”.
