Fueron bautizados 66 hombres en la Alcaidía de La Banda (Santiago del Estero, Argentina). Una ceremonia emotiva en la que participaron dos congregaciones evangélicas.
Santiago del Estero, oficialmente Provincia de Santiago del Estero es una de las 23 provincias que integran la República Argentina. Está ubicada en al norte del país, en la región del Norte Grande Argentino.
Su capital y ciudad más poblada es la homónima Santiago del Estero, siguiéndola en importancia La Banda. Allí se encuentra la Alcaidía de Varones de La Banda, prisión de frecuentes reyertas y motines, en algunos casos de gravedad.
Como contraste este pasado 5 de enero, en esa misma cárcel, 66 hombres fueron bautizados en una ceremonia emotiva en la que participaron dos congregaciones evangélicas.
Los que fueron bautizados, personas que cometieron distintos delitos y que se encuentran cumpliendo condena, proclaman ahora que su vida ha cambiado gracias a la fe en Jesús y como fruto de ella, una libertad interior que nadie les puede quitar.
La ceremonia se llevó a cabo durante el periodo de descanso de los presos, donde los internos de la Alcaidía, dependientes de la Departamental Nº 4, testificaron con su bautismo público su experiencia de conversión.
Una labor espiritual y social
Oficiaron el bautismo los pastores Guillermo Laborde y José Antonio Soraire. Ellos y su equipo vienen realizando una labor de asistencia a los presos social y espiritual, llevándoles el mensaje del Evangelio.
Su objetivo, además de transmitir la fe, es favorecer y lograr la reinserción de los detenidos a la sociedad, teniendo en cuenta además el trabajo interno de la prisión apoyando en la convivencia diaria valores como el respeto, orden y disciplina.
Desde el pasado mes de julio han realizado una serie de actividades como charlas, celebraciones y momentos de oración y reflexión dentro de la Alcaidía,.
En la emotiva ceremonia, los internos fueron sumergidos en agua, como signo de obediencia al Evangelio y proclamando haber tenido “un nuevo nacimiento” que les ha llevado a un compromiso de cambio en su comportamiento y visión a la vida como seguidores de Jesús.
