Esta es una pregunta que nos hacen a menudo, la cual no tiene una respuesta tan simple ya que existen diversos factores por los cuales una persona comienza a usar drogas.
De algo sí estamos seguros, nadie comienza a utilizar drogas esperando generar una adicción a ellas. Es decir, ninguna persona que creó una dependencia a alguna sustancia comenzó su uso con la meta de que su vida girara en torno a la misma. Al contrario, creemos que, si hubieran tenido un poco más de consciencia respecto al tema en general y todo lo que se ocasiona en torno a una adicción, tal vez hubieran elegido no comenzar por ese camino en primer lugar.
Por ello, la educación juega un papel muy importante con el objetivo de ayudar a las personas a que realmente tengan un panorama de lo que es el consumo, la adicción y sus consecuencias. No sólo basta con haber escuchado una y un millón de veces que “las drogas son malas”, se trata de generar verdadera conciencia.
A pesar de escuchar centenares de veces que las drogas son perjudiciales, muchas personas deciden comenzar a probarlas y, de las cuales, algunas terminarán en el infierno de la adicción.
Parece incoherente que las personas sepan que algo está mal y, aun así, decidan hacerlo.
Desafortunadamente no es tan incoherente teniendo como referencia el comportamiento humano a lo largo de la historia. Hablando específicamente de las drogas, la gente puede creer que por experimentar no pasará nada, pero las estadísticas sobre las miles de personas que usan y abusan de ellas indican otra situación a nivel mundial.
Si tuviéramos que buscar una respuesta “sencilla” a la pregunta ¿por qué la gente comienza a usar drogas? diríamos que lo hacen con la intención de cambiar algo en su vida.
No confundamos las cosas, con esto no estamos diciendo que todas las personas que buscan un cambio en su vida lo harán a través de experimentar con substancias psicoactivas. Del mismo modo, las personas que comenzaron a experimentar con drogas no necesariamente generarán una adicción.
Muchas personas tienen una vida que a los ojos de todos los demás es perfecta, pero aun así están buscando cambiar algo.
Puede ser que la sencilla razón es quitar el aburrimiento. Existe un famoso dicho popular que indica que “la ociosidad es la madre de todos los vicios”, como buena noticia de este contexto es que, si alguien comienza a usar drogas por ociosidad, quiere decir que la persona no está teniendo la capacidad de tener un buen rato por sí mismo y que está buscando algo externo que lo ayude. La motivación y la actividad positiva serán el mejor remedio.
Puede ser que lo hagan para encajar en un grupo. Si alguien tiene la necesidad de consumir para encajar en un grupo, no se tratará de una buena compañía, asimismo se deberá reforzar los valores personales para trazar un camino que verdaderamente guíe a las personas para alcanzar sus metas y sueños. No obstante, el común denominador sigue siendo el querer cambiar algo.
Otra de la razones recurrentes por las cuales las personas comienzan a consumir algún tipo de droga, es para evadir algo o para relajarse. Si una persona está en este supuesto, probablemente está inconforme con alguna parte de su vida y no se siente capaz de manejarlo.
Como éste se podrían poner muchos ejemplos más, pero el denominador común para comenzar el consumo de drogas es el buscar un cambio y falsamente creer que las drogas serán una solución. Lamentablemente con el tiempo esta falsa solución se convierte en gran parte del problema.
Por difícil que sea para alguien resolver sus problemas, las consecuencias del consumo de drogas siempre serán más graves que el mismo problema que están tratando de resolver. Bajo este contexto, las personas no sólo seguirán teniendo el problema original que creen que los hizo consumir, sino que ahora, además, tendrán los problemas propios del consumo.
La verdadera respuesta está en saber las causas de los problemas y, de esta forma, buscar una manera eficaz de manejar aquello que está aquejando la vida de la persona. Es decir, detrás de una persona que se ha refugiado en la adicción a las drogas o al alcohol, siempre hay una situación (o varias) que le desagradan, sintiéndose incapaz de confrontar y manejar. Por ello, cuando una persona se somete a un programa de rehabilitación, lo deseable es que este sea integral y que no solo busque el cese del consumo.
